¿Qué te parece esta lámpara? Es de lo más original, ¿verdad? Pues en esta ocasión, no vas a tener que gastarte nada para hacerte con una lámpara como esta, porque se trata de una idea DIY, de esas que tanto nos gustan. La verdad es que cuando empecé a ver cosas como esta, me quedaba maravillada de lo que se puede hacer reciclando, pero tengo que reconocer que día tras día descubro más cosas y mucho más novedosas.
Para empezar, tienes que hacerte con los materiales necesarios para la lámpara, aunque la ventaja es que no son muy complicados de conseguir. Aquí los tienes:
Después, tendrás que preparar la lata, forrándola con un papel en el que hayas diseñado previamente la plantilla con los agujeros que quieres hacer y la posición en la que va a ir cada uno.
Es una manera muy sencilla de hacer los agujeritos en orden, con la distancia adecuada entre ellos y consiguiendo un resultado de lo más profesional.
Por otro lado, me gusta la idea de hacer muchos y pequeñitos, porque el resultado final es muy bonito. Cuando hayas hecho los agujeros, el siguiente paso es quitar el patrón que habías hecho en papel y dejar la lata sin nada. Lo ideal es que la limpies bien, para sacarle todo el brillo y que destaque mucho más.
El siguiente paso es colocar en el interior de la lámpara una velita pequeña, para que dé luz. El resultado es espectacular: la sutil luz de la vela sale por los agujeritos de la lámpara, y da una sensación muy íntima y acogedora al espacio. La verdad es que merece la pena que te animes a hacer este DIY, porque es muy fácil y es resultado queda genial.
Si quieres, puedes hacer varias lamparillas con velas y colocarlas en jardín de tu casa, por ejemplo. ¡Una idea genial!
Vía| Pure Green Mag