¿Cuántos quebraderos de cabeza nos han dado las obras de arte de los mas pequeños, plasmadas en paredes de nuestro salón o en sus propias paredes…imaginando que eran pizarras gigantes ?
Ahora existen muchas soluciones y de todo tipo…pero por que no dar el placer a los peques de tener su propia pizarra en su propio cuarto, ahora podemos y de la manera mas divertida posible y ahorrando espacio.
Es una idea práctica, útil, divertida y económica.
Los materiales a utilizar son de lo mas sencillos y fáciles de encontrar, solo tenemos que hacernos de brochas, cinta de carrocero para marcar la zona a pintar, según el tamaño de nuestra “pizarra” el lugar, etc… Y como no, pintura pizarra que podrás encontrar en tiendas de bricolaje o especializadas en pinturas.
Su precio puede rondar desde unos 13,00 euros el envase de 750 mil hasta envases de 1kg por un precio aproximado de 35,00 euros y cubre aproximadamente un área de 5 metros cuadrados y podemos encontrarlos de diferentes colores, azules, malvas, rosas, verdes..
Son pinturas al agua, los cuales tienen bajo contenido en componentes orgánicos volátiles, es decir, sustancias químicas que contienen carbono, bromo, azufre cloro, etc… que se convierten fácilmente en gases o vapores..Así que podemos estar tranquilos y garantizar la salud de los mas pequeños.
Una vez escogida la zona a pintar y nos hayamos puesto manos a la brocha, es hora de dejar secar.
Cuando los mas pequeños quieran dejar volar su imaginación sobre su nueva pizarra, que sea utilizando tizas blandas, que podemos encontrar en cualquier papelería o tiendas de material escolar, ya que otro tipo de tipo de tizas mas duras, podrían rallar nuestra pizarra.
A la hora de limpiar, tan sencillo como un paño húmedo y ¡¡listo!! También podemos adquirir borrador de pizarra al látex, para limpiar en seco.
Imagen thinkstock.