Ya hemos hablado en alguna ocasión de los enormes beneficios que proporciona la luz natural a nuestro organismo, por eso la llegada de la primavera es tan bien acogida por todos, en contrapunto con lo que suele ocurrir cuando la estación venidera es el otoño o el invierno.
En este dormitorio que hoy os mostramos el sol ha empezado a hacer acto de presencia, se ha colado por las ventanas y acaricia con dulzura las sábanas, y ese es uno de los mayores placeres que podemos experimentar, sentir los primeros rayos de sol de la mañana cuando todavía no nos hemos despertado del todo.
Al tratarse de sábanas blancas, con tan solo unos pequeños toques de gris, esa luminosidad que entra por la ventana se refleja sobre la superficie de tela y hace que el dormitorio muestre una sensación de luz mucho mayor de lo que en realidad es.
Este es un truco básico si nuestra casa no es especialmente luminosa, decorándola con textiles claros conseguiremos sacarle el mayor partido.
Fotografías: La Mallorquina
Articulo original de DecoEstilo.com. Prohibida la reproducción total o parcial del contenido de este feed con fines comerciales.