Cada vez más, la gente quiere disfrutar del jardín durante todo el año, sin tener sus desventajas: coste importante de mantenimiento, consumo importante de agua, cuidados extremos para no estropear el cesped (¡cuidado con los niños!) y poder conservarlo en buenas condiciones, el color verde refrescante en verano, puede convertirse en una superficie con manchas amarillentas por el sol y el calor, o quemarse tras las temperaturas gélidas del invierno.
Elegir un cesped artificial es apostar por lo estético, por lo práctico, por el ahorro de agua, ideal para espacios donde juegan niños, alta resistencia a las temperaturas y a los rayos solares. Muy fácil de instalar, en cualquier superficie, en la mayoría de los casos lo puedes hacer tú mismo, con un buen asesoramiento (info@totpint.com). Es ideal para piscinas, áticos, chalets, jardines de comunidades de vecinos, pistas de pádel, terrazas de bares,… Responde a todas las necesidades de particulares, espacios públicos, profesionales y deportivas.
Se han conseguido, gracias a los avances técnicos, cespedes artificiales con tactos y apariencias muy similares a los naturales, dando así, estilo y presencia a la superficie cubierta por estos últimos. Con la gran ventaja de que el tiempo está ahí para disfrutar del cesped artificial, y no para estar dedicándolo a su mantenimiento, ni en cortarlo, ni regarlo, sobretodo con la falta de tiempo libre debido al ritmo actual de la sociedad.
Un cliente nuestro ha optado por poner cesped artificial, ¿tenéis algún consejo para él?