Hoy he ido a comprar unos moldes para hacer galletas, hay tanta variedad que me ha sido complicado elegir.
¡Eran todas tan bonitas y divertidas! que se me ha ocurrido que en una cocina podrían ser un perfecto elemento decorativo.
Puestas sobre un marco a modo de cuadro o creando una composición en la pared no solo las tendríamos a mano sino que decorarían nuestras paredes de uno modo original y nada visto.
Un besito Mury.