En muchas ocasiones, optamos por convertir habitaciones como el baño o la cocina en espacios en los que la parte más decorativa no tiene mucha importancia, centrándonos en el lado más funcional de estas estancias. Claro, que siempre podemos poner detalles decorativos, que además, pueden ser muy sencillos de hacer.
Es el caso, por ejemplo, de esta idea. Se trata de hacer un cuadro con un tema de lo más relacionado con la cocina: los cubiertos. Solo tienes que conseguir un juego o dos de cubiertos, pintarlos en un color alegre y utilizarlos para hacer un cuadro.
Puedes optar por forrar una madera con una tela o un papel para hacer la base y después, pegar encima los cubiertos. Para evitar que el cuadro se manche por la grasa y demás, puedes poner encima un cristal. ¿Qué te parece la idea?
Foto de Apartment Therapy